La Comarca de la Ribagorza tiene un rico patrimonio paleontológico que con los años ha ido adquiriendo más importancia por los restos encontrados.
Hay una línea geológica que transcurre desde Tremp hasta prácticamente Campo, que por sus características tanto los paleontólogos como los geólogos sabían de la posibilidad de encontrar restos fósiles como los que se encontraron en Arén
En el año 1995, Lluís Ardévol, encontró restos fosilizados de dinosaurios y dos años más tarde comenzaron a realizarse excavaciones en el municipio de Arén. En el yacimiento de Blasi, se han encontrado más de 300 restos de dinosaurios pertenecientes a 10 especies distintas. Entre ellos una especie nueva denominada Arenysauro y que se ha convertido en el más icónico de los encontrados. Este dinosaurio perteneció a la familia de los hadrosaurios. Tenían una boca característica en forma de pico de pato y una longitud que rondaba entre los cinco y los siete metros. En Arén, además del yacimiento de Blasi, donde encontramos paneles interpretativos, podemos visitar el yacimiento de icnitas de dinosaurio (huellas), a la entrada del municipio, próximo al pabellón polideportivo.
Los dinosaurios de Arén son importantes también ya que se han considerado como los más modernos de Europa, pertenecen al final del Cretácico, tienen 65 millones de años y son los últimos que existieron justo antes de la gran extinción.
Fruto de la investigación y de la importancia paleontológica de los restos encontrados, en el año 2007 se inauguró el Museo de los Dinosaurios de Arén, lugar por el que año tras año, pasan miles de visitantes, sobre todo grupos escolares, para descubrir el mundo de los dinosaurios y la paleontología.
Pero los dinosaurios de Arén, no son los únicos encontrados en Ribagorza. Durante los últimos años se han encontrado importantes restos paleontológicos Entre los municipios de Beranuy e Isábena. Entre los restos encontrados destacan una vértebra perteneciente a un ave gigante de 1,5 metros de altura. La vértebra de Beranuy es la evidencia más moderna de un ave mesozoica en Europa. Por último, en 2022, aparecieron fósiles de unas cáscaras de huevo de un cocodrilo de la especie Agaresuchus subjuniperus que convivió con los últimos dinosaurios de Arén.
