Su origen a la época medieval pero en el s. XVIII todo se transformaría.
Es un azud, una presa hecha en los ríos a fin de tomar agua para regar y para otros usos.
Se construyeron cuatro garitones, abiertos a los cuatro puntos cardinales, para conjurar o esconjurar las tormentas.
La ermita se halla dentro del conjunto defensivo que constituye el castillo de Mascún.
Todo el perímetro del edificio original fue recrecido en ladrillo en el siglo XVII.
Los expertos relacionaron las icnitas (huellas o pisadas fósiles) con mamíferos herbívoros extinguidos.
Una amalgama de construcciones de diferentes épocas.
