El castillo-abadía de Montearagón, símbolo para la población de Quicena.
Estas paredes son característicos de la Hoya de Huesca.
Algunas de las etapas son cómodas de realizar en bicicleta y aptas para el recorrido ecuestre.
Ramal del Camino Catalán que penetra en la Hoya de Huesca por Pertusa.
Es un azud, una presa hecha en los ríos a fin de tomar agua para regar y para otros usos.
En torno a estos pozos transcurría la vida en muchos pueblos del sur del Somontano.
Se construyeron cuatro garitones, abiertos a los cuatro puntos cardinales, para conjurar o esconjurar las tormentas.
La ermita se halla dentro del conjunto defensivo que constituye el castillo de Mascún.
Todo el perímetro del edificio original fue recrecido en ladrillo en el siglo XVII.
La Virgen se apareció entre viñas en plena Reconquista.
Fue lugar de parada frecuente entre los pastores que realizaban la trashumancia.
Los expertos relacionaron las icnitas (huellas o pisadas fósiles) con mamíferos herbívoros extinguidos.
